Caso 69006 2 pts. (1 calificaciones) Cía: Walmart11/08/12

Walmart antes Aurrerá Satélite apestan

Categoría: Tiendas y Comercio / Supermercados

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Buenos días, esto ocurrió el día de la toma de posesión de Ernesto Zedillo,dado que era día festivo a mi familia se le ocurrió ir a dar una vuelta a la ahora extinta Aurrera Satélite (Hoy Walmart), llenamos el carrito de mercancías a adquirir cuando a esta servidora, entonces una veinteañera, se le antojaron unos tacos del área de congelados, ya había agarrado los tacos pero a último momento dudé y regresamos a cambiarlos,dejamos a mi abuelita, hoy un angelito, en el pasillo con el carrito, una señora chaparrita, gordita, con severos problemas circulatorios, sumamente noble.

De verdad que ni siquiera escuché nada raro sólo que al regresar me extrañó ver mucha gente alrededor, pero como era día festivo pues no le tomé importancia, le dijimos que ya nos ibamos y en eso pasa un tipo y dice "ella se cayó", yo ni entendí en ese momento, mi santa abuela ni decía nada hasta que al escuchar al empleado dijo "no es cierto, él me empujó", como había gente alrededor no me percato de nada, la veo agarrarse la cabeza y la pierna, pero cuando me acerco mi abuela estaba sangrando,le preguntamos "¿Qué te pasó? y nos relató que nos estaba esperando cuando un pend de esos que llevan muchísimas cajas no se dio cuenta de que estaba allí paradita y la aventó, llegó el gerente de esta tiendilla, y le daba la razón al empleado aunque estaba escuchando que sí había testigos de cómo aventó a mi abuelita, cuando me enojo soy muy malhablada y sobre todo ver que mi abuela tenía una herida en la cabeza me prendió, estaba espantadísima, dice el gerente vamos a la enfermería y en el camino yo iba diciendo "¿y qué jdeschm tenemos que ir a hacer allá si únicamente venimos a comprar el super? Déjenme a este cab que le voy a dar en la ma para que se fije y respete a los viejitos" a lo que todavía cínicamente el gerente y subgerente me invitaban a no decir malas palabras y a guardar la compostura, llegamos a la famosa enfermería y es un p cuarto sin alcohol y sin gasas ni nada, o sea que tuvieron que regresar a buscar los elementos, la curaron, dijeron que no tenía nada, finalmente y por tanto pleito que les echamos accedieron a llevarla al hospital a que la revisaran, yo iba temblando de los nervios, estaba chavita, y escuché que estos es+úpidos pretendían llevarla al seguro a Santa Mónica, tantas madres menté , que accedieron a llevarla a un hospital privado, en un principio la querían conducir al HospitaL Satélite pero como por esos días había salido en el Ecos una queja de una señora que se les cayó cuando la estaban operando, protesté y llegamos al San José, estuvimos toda la tarde hasta las ocho de la noche, la sacaron con collarín y tuvo que ir a ver al traumatólogo, que estos le estaban haciendo al cuento para no pagar luego esas consultas externas y parecía como si les fueramos a pedir caridad, en áquel momento la cuenta del San José ascendió a seis mil quinientos pesos y la verdad me atonté porque por el daño que le causó a su trabajo no sé si hubiéramos pedido una indemnización. Jamás se me va a olvidar ese día, por eso insisto que no hay que dejarse apantallar por nadie, uno va y paga los precios que ellos indican por un servicio y exige un servicio de calidad. ¿No que no tenía nada?