Caso 146881 1 pts. (1 calificaciones) Cía: Ofix24/10/19

Ofix, empleada y supervisor mala leche quieren cobrar doble

Categoría: Tiendas y Comercio / Almacenes

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Al querer usar su escáner, mi USB no servía, así que la empleada me preguntó si quería pagar de una vez y regresar con otra USB o pagar hasta después. Pagué antes porque me dió la opción. Luego cuando regresé, ella tenía una sonrisa de oreja a oreja y gesto también de "ya me tienes harta" como con la cara que ponen los bullies que aún van el secundaria (que no tiene porqué).

Hizo como que no quedaba en sus manos y le fué a preguntar a su supervisor. Los dos con sonrisa socarrona. Ese Ofix me gustaba porque está muy cerca de mi depa así que siempre que necesito cosas de pepelería voy directo ahí. De hecho, antes me encontraba muy seguido a algunos de los empleados en una comida corrida cercana y compartíamos mesa, eses grupo de empleados era muy amable.

Apenas cambiaron a todo el personal a otro Ofix de la ciudad. Se me hizo muy absurdo que nada más por querer hacer bullying pierdan clientes. Por $10 es una tontería, ya que ni se los quedan ellos. Sólo son mala leche. Desde ese momento consideré que tal vez su sistema se reinicia o algo así y que por eso no guardan el archivo escaneado y tienen que cobrar doble, pero si ya la empleada ya sabía entonces para qué hace pagar doble y anda con esa actitud grosera como de triunfo chiquito.

En fin, como dije antes por $10 se me hace una tontera que quiera esparcir su amargura con la vida nada más por ociosos. Como dato extra desde la primera ida al escaneo tenía cara de burla y me trató todo el rato como si fuera tonta pero se me hizo que nada más tenía esa expresión y ya, como tanta gente que pone caras y no se da cuenta.

No creí que iba a estar de bully absurda, y menos que su supervisor iba a estar en el mismo plan. Lo malo es que a esas empresas gigantes les da igual, porque tanto explotan a sus empleados e infravaloran a los que son buenos con los clientes y en el trabajo en sí, como les tiene sin cuidado tener gente apática, grosera, floja y abusiva.